La multinacional americana Goodyear ha anunciado a sus accionistas la enajenación de algunos activos que ya no consideran estratégicos, entre ellos Dunlop. Más allá de las consideraciones financieras e industriales, surge una pregunta: si se confirma la desinversión, ¿qué efecto tendrá en los programas deportivos que ha elaborado la histórica marca anglosajona? Entre ellas se encuentra la fuerte inversión anunciada en las últimas semanas en el Campeonato Italiano de Velocidad, la serie nacional más importante. A partir del 24, Dunlop se convertirá en el único proveedor de todas las categorías, asumiendo también un papel estratégico como socio de la Federación Italiana en la promoción del CIV.
Reducción de costo
Richard J. Kramer, presidente y director ejecutivo de Goodyear Tires and Rubber habló sobre la operación, presentándola como “reposicionamiento de cartera“, es decir, con vistas a reducir los costes y, por tanto, el elevado endeudamiento del grupo, y racionalizar su presencia en los mercados, en particular el europeo. Según los analistas financieros, la intención del consejo de administración de la compañía estadounidense sería renunciar a la marca Dunlop para centrarse en la joya de la compañía, es decir, la propia Goodyear. Esto significa que en un futuro muy próximo Goodyear podría convertirse en un competidor directo de Dunlop.
Una adquisición “natural”
El director general no proporcionó más detalles sobre el procedimiento de desinversión, pero en los círculos financieros se da por sentado que Dunlop podría acabar bajo el control total de la japonesa Sumitomo Rubber Industries, que ya posee la marca y posee algunas de las áreas de negocio de La propia Dunlop. En realidad, estamos hablando de un grupo industrial que no sólo produce neumáticos para coches y motos, sino también muchos otros productos derivados del caucho.
Estrategias deportivas
A corto plazo no se puede descartar que se produzcan cambios en los planes deportivos de Dunlop. Al final de esta temporada la marca abandonará MotoGP, donde durante años fue el único proveedor de Moto3 y Moto2, dejando el testigo a Pirelli. Al mismo tiempo, sin embargo, Dunlop aumentará su presencia en nichos específicos, como el CIV. El acuerdo, de carácter plurianual, es el resultado de una inversión muy importante: no hay cifras oficiales, pero según fuentes autorizadas supondría un compromiso total de poco menos de 1 millón de euros al año. Una suma considerable para un campeonato nacional. Desde una perspectiva de mediano plazo, será interesante ver si esta revolución financiera también tendrá un impacto en el compromiso en la pista.
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