Cerrando pruebas a un ritmo récord. Fabio Quartararo fue uno de los pocos pilotos que también estuvo activo por la tarde en Misano, y fue en esta ocasión cuando rompió el crono. No será un récord homologado, pero en Yamaha ya se palpa la satisfacción, tras los comentarios realizados ayer por el propio vigente campeón de MotoGP. El M1 2023 ya gusta, sobre todo el nuevo motor: es una primera especificación y aún queda trabajo por hacer, pero ya está convenciendo al piloto francés, que había pedido ciertas garantías a la hora de la renovación. La casa Iwata parece estar en el camino correcto para la próxima temporada.
“Va en la dirección correcta”
Otra confirmación viene del director del equipo. Massimo Meregallique es el portavoz de la satisfacción en Yamaha. “Son las mejores pruebas de los últimos tres años” señaló a Sky Sport. En los boxes se deja ver desde ayer a Luca Marmorini, un hombre de gran experiencia y competencia en cuanto a motores, ex Ferrari en F1 y ex Aprilia en el Mundial. Su compromiso fue un importante primer paso tras la renovación de Quartararo, para demostrar las serias intenciones tras las peticiones del vigente campeón. “El motor 2023 va en la dirección correcta, hemos cumplido la promesa hecha en Quartararo en el momento de la renovación” de hecho, señaló Meregalli. Además del motor, también pruebas de chasis en estos días. “Fabio lo usará a partir del próximo GP en Aragón, mejora en las curvas” Meregalli especificó. En definitiva, dos días de test más que positivos. En primer lugar, pequeñas mejoras para ayudar a Fabio Quartararo a contener de alguna manera a sus rivales en los próximos GP. Pero también hay noticias mucho más sustanciales para la Copa del Mundo de 2023, como había pedido el campeón francés. No es una meta, sino un punto de partida.
Quartararo claro: “Así no hubiera seguido”
El campeón del mundo de 2021 ha precisado que aún queda trabajo por hacer antes del próximo GP inaugural en Portimao, pero parece divertirse más pilotando su M1. Luego aparecieron algunos datos bastante interesantes ya en la sesión de la mañana: no sólo Quartararo lideraba la clasificación, sino que también conseguía la segunda punta de velocidad. Su Yamaha alcanzaba los 298,3 km/h, ex aequo con la Aprilia de Viñales y precedida únicamente por la Ducati de Jorge Martín a 300 km/h. Mirando todo el GP en Misano, ¡su velocidad máxima fue de 296,7 km / h en la Q2! “¡El nuevo motor funciona! Estoy feliz de que Yamaha haya cumplido su promesa, con el motor actual no habría continuado con ellos por otros dos años”. Es un Quartararo que habla claro, pero que no oculta la satisfacción por los primeros pasos ya destacados de cara a 2023. “Además de las mejoras, en el garaje de Yamaha veo gente decidida, con muchas ganas de seguir mejorando”. Señalas que algo realmente está cambiando.
Foto: Valter Magatti