De la súper calificación a una Carrera 1 fallida. Stefano Manzi cobra menos de lo que esperaba el sábado en Phillip Island. El nuevo abanderado de Ten Kate había brillado en la calificación, colocando su Yamaha por delante de todos y conquistando así su primera pole position. Pero durante la carrera, la lluvia y los accidentes trastornan todos los planes. Cuando el tiempo es tan cambiante, elegir los neumáticos adecuados también es cuestión de suerte. En cualquier caso, Manzi se llevó a casa puntos preciosos y está deseando que llegue el domingo, es decir, la oportunidad inmediata de redención.
El temido mal tiempo fue uno de los protagonistas del sábado australiano. Superpole arrancó tras unas gotas de lluvia que condicionaron la sesión durante mucho tiempo. Hasta los minutos finales, cuando Manzi no dejó escapar la oportunidad y se hizo con la primera casilla de la parrilla. Una primera vez en la nueva colaboración con Ten Kate, pero lamentablemente no pudo materializarse en la Carrera 1. Manzi se arriesgó centrándose en neumáticos intermedios, pero la lluvia lo anuló todo. Por lo tanto, el #62 tuvo que reducir la velocidad, pero logró llevarse a casa un buen sexto lugar en la línea de meta.
“El día había comenzado muy bien” subrayó Stefano Manzi, refiriéndose a su primera pole position. La salida ideal para intentar entorpecer a Bulega, sólido líder en los entrenamientos libres y por tanto un observador especial en carrera. Pero no salió como estaba planeado. «Después de la bandera roja elegimos los neumáticos de lluvia» explicó Manzi. “Cuando retrasaron la reanudación optamos por los intermedios, ya que la pista se estaba secando”. Una apuesta que no dio resultado. “Fue bien hasta la mitad, luego comenzó a llover nuevamente y tuve que reducir la velocidad. Eso fue lo mejor que pude hacer» admitió el italiano.
“Una carrera caótica” agregó el gerente del equipo, Kervin Bos. “Claramente estamos un poco decepcionados después de la pole. Pero Stefano ha demostrado que puede ser rápido en todas las condiciones”. Al final, sin embargo, llegaron puntos valiosos, pero el objetivo es mucho más. El discurso, por lo tanto, se pospuso para el domingo, cuando tendrá lugar la segunda y última carrera del fin de semana en Australia. La apuesta que salió mal hoy es sin duda una motivación extra para mañana: salvo otros giros y vueltas, esperemos que esté entre los protagonistas de la carrera.
Foto: Ten Kate Yamaha