El QJ aún no ha sido presentado oficialmente y a estas alturas no habrá una presentación real. Sin embargo, la moto china estará presente a partir del 22 de marzo en Barcelona y en esa ocasión se harán las fotos habituales. Raffaele De Rosa realizó varias pruebas, continuando el desarrollo de la moto. para el Campeonato del Mundo de Supersport. El fabricante chino, el equipo y el piloto de Campania quieren, sabiamente, mantener un perfil bajo. Hay que ser realistas: la moto está muy inmadura y Raffaele no podrá hacer milagros. Su papel es principalmente el de piloto de pruebas. Con su enorme experiencia, continúa el desarrollo de la moto, consciente de que no podrá aspirar a resultados significativos. Yari Montella, Stefano Manzi, Federico Caricasulo y compañía estarán a una distancia sideral, al menos en las primeras carreras: es lógico que así sea, nunca nadie se ha subido a una moto nueva y la ha llevado inmediatamente a lo más alto. .
Sin embargo, Raffaele De Rosa está entusiasmado con este nuevo desafío, como le dice a Corsedimoto.
Raffaele De Rosa, ¿cómo avanza el desarrollo del QJ?
“Estamos trabajando. El camino será largo. Ya hemos probado la moto, pero todavía no en la última versión Supersport. Tanto el equipo como el fabricante pusieron mucho esfuerzo. Hemos hecho cosas en apenas unos meses que normalmente tardan un par de años. Hay muchas ganas de trabajar y mejorar. Realmente me gusta ver este impulso sabiendo que el proyecto aún se encuentra en sus primeras etapas. Lo soy, de hecho, todos somos muy realistas”.
¿Qué diferencias encuentras entre tu presente en QJ y tu pasado en un equipo con motos ya ampliamente probadas?
“Ahora todo es completamente diferente, sólo en cuanto al tipo de trabajo. La motocicleta está en constante y continua evolución. Generalmente durante las pruebas los cambios son mínimos, se refieren a detalles, particularidades. Aquí, sin embargo, las intervenciones son sustanciales, intentamos tantas cosas que no tienes ni idea. Para mí es súper estimulante, un gran desafío. En el pasado iba a la pista y la moto era la misma, di algunas sugerencias pero en realidad simplemente tenía que pilotar. Ahora me siento parte de un gran proyecto: yo doy las indicaciones, los técnicos me siguen, se ponen a trabajar y nosotros trabajamos para intentar crecer”.
¿Qué esperas del fin de semana de Barcelona y del campeonato?
“La verdad es que no lo sé porque todavía no he probado la moto en configuración supersport. En este momento es imposible decir dónde estaremos, a qué resultados podemos aspirar y determinar el nivel. Sólo puedo decir que haremos todo lo posible para mejorar carrera tras carrera y esperamos poder obtener algo de satisfacción a lo largo de la temporada”.