El nombre que no esperas. John McPhee es, de hecho, una de las grandes sorpresas de la Carrera 1 en Phillip Island. Una carrera marcada por accidentes, lluvia a ratos, dos salidas (aquí el reportaje). Una atrevida situación de la que el piloto escocés, 20º y último de la parrilla, consigue sacar el máximo partido, consiguiendo un resultado increíble. El tercer escalón corresponde por tanto a este debutante absoluto, que acaba de llegar a Supersport tras una década en Moto3. Con los colores del igualmente debutante Team Vince64 de Puccetti, que ya disfruta de su primera gran satisfacción.
“La verdad es que no me sentía suficientemente preparado para esta carrera” es el primer comentario de un John McPhee incrédulo y feliz en el parque cerrado. “Era la primera vez con esta moto, con la que no rodaba mucho, y de hecho en las primeras vueltas no me sentía tan a gusto”. Pero la suerte llegó con el clima inestable y una carrera llena de idas y venidas, situación que le permitió subir a un podio lleno de significados. Como se mencionó, McPhee era un veterano de Moto3, un capítulo cerrado debido a los límites de edad. Ahora se ha abierto una nueva historia y no podía haber mejor inyección de confianza.
“Estoy feliz de haber podido demostrar lo que puedo hacer”. El escocés #17 no se olvida de los chicos de su equipo, el Vince64 Team dirigido por Vincenzo Scandizzo, en colaboración con Manuel Puccetti. “No podría estar más agradecido con todo este grupo de personas” señaló McPhee. La colaboración realmente comenzó con el pie derecho. La experiencia de Moto3 terminó con un regreso a la victoria en su penúltima carrera, ahora el piloto de Oban de 28 años comienza la aventura de Supersport con una sonrisa. Quién sabe si habrá otras sorpresas para la segunda carrera de mañana.
Foto: Vince64