Superbike temía haber perdido a uno de sus iconos, pero tras el naufragio australiano Jonathan Rea rápidamente volvió a levantar la cabeza. En la primera media jornada de entrenamientos en el Circuit de Catalunya, el nuevo fichaje de Yamaha fue el más rápido, con una referencia de 1’41″655 que le devolvió la sonrisa de sus mejores días. Al regresar al garaje tras el sexta Campeonato del Mundo, acarició la YZF-R1 antes de entregársela al mecánico, expresando dramáticamente su satisfacción. Rea en Phillip Island, cero puntos en tres carreras, fue una lástima para ser verdad. Evidentemente esta golondrina no puede dar un salto, también porque el asfalto con muy poco agarre indujo a los demás protagonistas a girar poco. Pero es una señal alentadora, que tanto el piloto como Yamaha estaban esperando.
“Una mierda tras otra”
En los últimos días, los turismos han estado circulando por aquí durante mucho tiempo, por lo que la pista está muy sucia y no es muy rápida. Sin embargo, en las tres primeras horas de trabajo (conclusión a las 18 horas), Jonathan Rea se quedó por debajo de la vuelta rápida de la carrera 2 de mayo de 2023, establecida por Álvaro Bautista con la Ducati en 1’41″730. Ese fin de semana, el español había dominado la escena, logrando un triplete con una facilidad desarmante. El récord oficial es 1’41″135, establecido por el propio Bautista en la carrera Superpole del día 22. Al regresar al garaje Jonathan Rea se encontraba rodeado de once técnicos, entre ellos dos especialistas de Ohlins, el proveedor de suspensiones. “En Australia tenía y teníamos muchas expectativas, pero Jonathan ha perdido el rumbo desde las pruebas anteriores, haciendo una estupidez tras otra” uno de los miembros del equipo nos reveló, aludiendo a elecciones de configuración incorrectas. La R1 es una garantía, Andrea Locatelli era muy rápido y estaba luchando a fondo por ganar. Entonces es el conductor quien tiene que encontrar el camino. Rápidamente, si es posible.