Toprak Razgatlioglu lo dio todo para intentar evitar que Álvaro Bautista volviera a ser campeón en 2023, pero al final tuvo que rendirse. La suya sigue siendo una gran temporada, pero el binomio formado por el español y Ducati fue superior. Puede estar orgulloso de lo que ha hecho con su Yamaha R1, que dejará tras esta última prueba de Superbikes en Jerez. Su futuro está en la BMW M 1000 RR, que no probará hasta diciembre.
Superbike, Razgatlioglu felicita a Bautista
Al final de la Carrera 1, el piloto turco no pudo más que elogiar el triunfo de su rival: “Es muy fuerte y tiene un buen paquete. No sólo pilota una Ducati, sino que cada fin de semana está muy fuerte. Se merece el título, pero no estoy contento con quedar segundo: mi objetivo siempre es ganar. Estoy feliz porque el título se decidió en la última ronda. Esto es bueno, porque demuestra que sintió la presión y el estrés. Siempre peleé con él, a veces gané y otras quedé segundo. Lo felicito. En algunas ocasiones tuvo una gran ventaja. Me gustaron algunas carreras, pero después de otras me enojé.“.
Hablando de la primera carrera disputada en Jerez y de terminar segundo detrás de Álvaro, Razgatlioglu explicó por qué nunca pudo atacar: “No había forma de atacarlo. Quería ganar, aunque él todavía hubiera sido campeón. Ya después de cinco vueltas mi neumático trasero estaba patinando y tenía problemas para acelerar. En la curva 5 Álvaro era increíblemente rápido en aceleración, parecía que estuviera pilotando una MotoGP. Aquí monté la Yamaha MotoGP, la aceleración de su Ducati es similar“.
Todavía quedan dos eliminatorias, quizás el piloto de Yamaha pueda tener una oportunidad en la carrera Superpole. Quiere terminar la temporada subiendo de nuevo al escalón más alto del podio.
Foto de : WorldSBK