En seco, Álvaro Bautista probablemente se los habría comido todos. Esperaban que lloviera, para aprovechar su conocida aversión al clima húmedo. Los adversarios se dieron por satisfechos, porque en Phillip Island hubo media inundación antes de la salida. Pero el campeón del mundo no se puso nervioso, metió la cabeza debajo del carenado y al final de un gran duelo doblegó al desafortunado Jonathan Rea. El as de Kawasaki en la carrera número 378 de su carrera, más que nadie, fue traicionado por el control electrónico de la caja de cambios. Una anomalía de considerable impacto, sobre todo en mojado: el segundo puesto del seis veces campeón del mundo es casi milagroso. Toprak Razgtalioglu no se involucró, navegando muy lejos de los dos primeros, pero al final salvó el podio. Vueltas y vueltas, estamos hablando del habitual Magnici Tre de hace un año.
El dictador
Así que la lluvia no cambió las cartas en absoluto. Pero Bautista asestó un golpe a la autoestima de sus contrincantes, que ahora saben que para volcar el equilibrio técnico de una Superbike cada vez más en manos de Ducati, no bastará con esperar siquiera la ayuda de Giove Pluvio. Alvarito no tiene puntos débiles, pues aquí en Phillip Island siempre ha sido muy fuerte: quizás su particular actitud con esta pista le dio la convicción de que podía ganarla incluso en las que para él eran las peores condiciones. Ahora es de esperar que Kawasaki y Yamaha tengan algo en el bolsillo, porque el (fuerte) riesgo es enfrentarse a un campeonato que ya está abordado.
Locatelli y Bassani no defraudan
Este inicio de Superbike ’23 parece ser la continuación de la edición anterior también para las posiciones de respaldo. Andrea Locatelli, escudero de Yamaha, ha vuelto a ser el mejor de los demás, hablando de pilotos oficiales. En cambio Axel Bassani fue el mejor de los «independientes» resucitando tras ensayos muy complicados. La lluvia es pan y mantequilla para el piloto de Veneto, pero el quinto lugar en cualquier caso es un buen soplo de aire fresco después de una pretemporada por debajo de las expectativas.