Su primer campeonato de Superbike se acabó antes de tiempo por la doble fractura sufrida en Indonesia, pero Iker Lecuona se recuperó a tiempo para disputar la prueba de Jerez. Desafortunadamente, la lluvia arruinó los planes del equipo HRC, que trajo algunas cosas nuevas a España.
El director del equipo, Leon Camier, anunció una nueva actualización del motor, un nuevo basculante y una nueva electrónica. La de 2023 no será una nueva CBR1000RR-R Fireblade, pero habrá algunas actualizaciones que deberían hacerla más competitiva. Hay una gran confianza en Honda, aunque existe la conciencia de que no será fácil socavar al trío Bautista-Razgatlioglu-Rea.
Superbike, Lecuona apunta alto con Honda
Lecuona está muy decidido, tras un primer año como debutante tiene muchas ganas de dar un claro salto de calidad en 2023: “Comenzaremos la próxima temporada con una mentalidad diferente a la anterior. Sabemos que tenemos un buen potencial y debemos tener la mentalidad de que podemos luchar por el podio si todo sale bien.“.
El expiloto de MotoGP cerró el Mundial de Superbikes 2022 con la novena plaza de la general y solo un podio conquistado (en Assen), además de una pole position (en Barcelona). Quiere más ahora: “El objetivo – él añade – es tener el potencial para empezar una temporada en lo más alto. Queremos pelear por el campeonato. Para hacer eso, necesitas desarrollar la bicicleta rápidamente.. Honda está haciendo todo lo posible para traernos material nuevo, espero que luchemos por las primeras posiciones. Aquí todos quieren ganar, tenemos que darlo todo.“.
En HRC todo el mundo está ocupado tratando de volver al éxito en WorldSBK, el último título fue James Toseland en 2007. La CBR1000RR-R Fireblade parece tener un buen potencial, pero hay detalles en los que es necesario trabajar para que sea una ganadora. Con un año de experiencia a sus espaldas, Lecuona y Vierge sin duda pueden hacerlo mejor en 2023. Habrá que seguir de cerca al equipo oficial Honda.
Foto: Instagram @ikerlecuona_27