El año pasado Redding ganó en suelo checo y Álvaro pudo aprovechar el rebufo, pero Toprak ha mandado una señal clara a Donington y ahora quiere confirmación con Johnny hambriento de revancha
Es el último esfuerzo antes del largo parón estival que durará un mes. El Campeonato del Mundo de Superbikes aterriza en la República Checa para la ronda Most. Un circuito inédito para las derivadas, que vuelven tras el debut de la temporada pasada.
En aquella ocasión Toprak Razgatlioglu capturó gran parte de la atención en la escena, asegurando la Carrera 1 y la Carrera Superpole, mientras que Scott Redding se llevó la victoria en la Carrera 2. Quien se quedó con la boca seca fue Johnny Rea, tal y como sucedió en la reciente ronda de Donington, donde el Caníbal no pudo dar el escalón más alto en la carrera de casa en una ocasión.
El ayuno de victorias del norirlandés se ha prolongado durante más de dos meses, concretamente en la Carrera 2 de Estoril, cuando ganó el mano a mano con Álvaro Bautista. A pesar de que solo 17 puntos le separan del piloto de Ducati, el piloto de Kawasaki sabe que es necesario dar una señal clara con el objetivo de derribar las jerarquías. Al mismo tiempo, Bautista es consciente de que esta puede ser la oportunidad adecuada para volver a ganar, consciente del potencial expresado por Redding hace un año sobre la Panigale V4 en la pista checa.
Sin embargo, tendremos que lidiar con T.oprak Razgatlioglu, ciertamente regenerado tras su hat-trick en el Reino Unido, lo que le permitió llevar la brecha desde la cima a 43 puntos.
En resumen: el centro de atención está en los tres primeros, pero ciertamente no podemos olvidar di Scott Redding, toda una revelación con BMW la semana pasada en Donington. Las novedades aportadas a la pista por el fabricante de Mónaco han permitido a su abanderado subir el listón y ahora solo queda confirmar.
Un discurso que en cierto modo también une Michael Rinaldi, así como Axel Bassani, ambos ambiciosos de mostrar su potencial en el V4. Hay quienes luego van en busca de la redención, con la intención de pasar página tras las recientes decepciones: estamos hablando de Garrett Gerloff y Andrea Locatelli, ambos obligados a desempeñar el papel de espectadores en el escenario de Donington.