Toprak Razgatlioglu apuntaba al trío y cuestionaba la primacía de Superbike. En cambio, Álvaro Bautista respondió de la misma manera: el enfrentamiento directo Yamaha vs Ducati terminó 2-1 pero en el balance el español dejó solo tres puntos en el campo. El vigente campeón afronta el tríptico del hemisferio sur (9 carreras, 186 puntos en juego) con una pasiva de -56 desde el top mundial. Contra una combinación tan feroz, confirmarse como el # 1, hasta la fecha, parece ser una empresa en los límites de lo posible. “El campeonato aún no ha terminado” Toprak advierte. Pero que en su corazón crea seriamente en ello, todo quedará probado.
“En la recta perdí medio segundo”
Al igual que Jonathan Rea, el otro rival directo de Ducati también destacó la superioridad de la Panigale V4 en recta. “Desde la última curva hasta la primera Bautista me hizo ganar 5-6 décimas cada vez” señaló Razgatlioglu. Si por las imágenes de TV la situación parecía evidente, con el #19 Rojo pasando a los oponentes con extrema facilidad, del análisis de los datos no se desprende toda esta superioridad. En las 20 vueltas, la mejor T1 de Álvaro Bautista (el primer sector) fue de 31″ 544, frente a Toprak en 31″ 591 y Rea 31″ 663. Bailan unas milésimas, no décimas. La comparación de las velocidades máximas es menos indicativa, porque en Superbike se da el dato absoluto, es decir, la única mejor pasada, no la media de los cinco más rápidos como en MotoGP. Así que la influencia del efecto de estela es sustancial. En cualquier caso, los valores registrados en la carrera 2 son estos: Bautista 317,8 km/h, Toprak 315 km/h, Rea 315 km/h. Una vez más, las diferencias son mínimas.
El plan que no funcionó
“Álvaro era muy rápido en la derecha pero el plan era quedarse ahí con él, llevarlo atrás y esperar a lanzar el ataque en las vueltas finales” reveló Razgatlioglu. A falta de cinco vueltas para el final, lanzó un ataque decisivo, sorprendiendo al piloto de Ducati, que, sin embargo, volvió a poner las cosas en orden en la siguiente recta. A partir de ahí, al darse cuenta de que el jugador turco sería muy agresivo, aumentó aún más el ritmo y el desafío terminó. “Para quedarme con él le pedí demasiado a los neumáticos, al final el delantero se me escapaba en cada curva, ya no podía atacar. Después de todo, dos de tres victorias no están nada mal”. Bautista no pierde el ritmo, pero el turco no se rendirá tan fácilmente.
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