El circuito inglés, resurgido en 2019, acogerá el próximo GP y pondrá a prueba neumáticos y pilotos
Después de un año de ausencia, MotoGP regresa a Silverstone, una de las pistas históricas para los entusiastas del motor. Con poco menos de 6 kilómetros de longitud, es una de las pistas más rápidas del calendario, con 10 curvas a la derecha y 8 a la izquierda.
Para el Gran Premio de Gran Bretaña, los técnicos Michelin pondrán a disposición de los pilotos de MotoGP los clásicos tres compuestos (blando, medio y duro) con los neumáticos delanteros que tendrán una construcción simétrica a diferencia de los traseros, más duros en el lado derecho.
Sin embargo, nunca se puede confiar en el clima inglés y en caso de lluvia, los neumáticos de lluvia estarán disponibles en compuestos blandos y medios (también en este caso los traseros serán asimétricos).
Piero Taramasso, Gerente de Michelin, hace balance de la situación: “Después de la cancelación de la carrera de Silverstone el año pasado, estoy deseando que llegue la carrera de este año, al igual que el resto del equipo Michelin. Este es un circuito icónico con una gran historia, por lo que siempre es bueno venir y ver a los ciclistas luchar tras los pasos de neumáticos de tantos grandes ciclistas. Desde un punto de vista técnico, no es un circuito fácil debido a la combinación de altas velocidades en rectas y curvas muy rápidas. Con esto en mente, nuestros diseñadores han trabajado duro para crear neumáticos que puedan soportar el calor generado por las altas velocidades y proporcionar la notable estabilidad, agarre y agilidad que requieren los ciclistas para manejar los rápidos cambios de dirección.“.
.