En la tercera prueba del campeonato de MotoGP 2024 Marc Márquez acaba sobre el asfalto. El segundo puesto conseguido en el sprint del sábado auguraba un domingo potencialmente memorable, pero una serie de problemas técnicos arruinaron el fin de semana del piloto de Gresini, que se cayó a mitad de carrera en la curva 11.
Márquez cae en su Austin
De la gloria al polvo, así se puede resumir el domingo de Marc Márquez en Austin. Iba liderando el grupo, por delante de Pedro Acosta y Jorge Martín, persiguiendo su octava victoria en suelo texano, pero de repente perdió el control de su Ducati Desmosedici GP23. Cuando se apagó el semáforo, el ocho veces campeón del mundo, que salía desde la primera fila, perdió sólo una posición frente a Pecco Bagnaia, pero no se soltó. En la última curva de la COTA rozó los neumáticos de su compañero Jorge Martín y estuvo a punto de caer en su heat. Hemos visto al mejor Márquez desde su llegada a Gresini, luchador, valiente, con espíritu de líder, tomando el liderato de la carrera en la undécima vuelta. Una alegría fugaz se desvaneció en muy poco tiempo, delatada por el freno delantero de su Ducati que se había calentado demasiado.
Problemas con el freno delantero
Es difícil ocultar una cierta decepción tras tropezar con su pista favorita. Debería haber sido un día de MotoGP muy diferente para Marc Márquez, pero tuvo que llegar temprano a boxes. “A veces pasa. Hasta ese momento tuvimos una carrera divertida. Especialmente porque tuve que hacer una doble remontada. Las sensaciones eran buenas, pero tuve muchos problemas con el freno delantero.“. Desde el principio quedó claro que algo andaba mal con su Ducati GP23 de Gresini. “A las 11 intenté tomar la delantera para ver si cambiaba la temperatura del freno delantero, pero se rompió la palanca, intenté frenar dos o tres veces, pero la velocidad aumentó. Me cerré un poco y al intentar parar con la moto inclinada me caí. Sabemos dónde tenemos que mejorar, lo importante es que estábamos luchando por las primeras posiciones.“.
Marquez guarda en Jerez
Tras la caída de Portimao, provocada por un contacto con Pecco Bagnaia, llega otra aún más amarga para el múltiple campeón de MotoGP. La alegría de la primera victoria con Ducati vuelve a posponerse. “Lo importante es que progresamos en todas las carreras, desde Qatar hasta Portimao. Esta fue la primera carrera larga en la que luché por las primeras posiciones. Me caí sí, pero al menos estaba en cabeza, eso es todo…“. Junto a su equipo solucionarán inmediatamente el problema técnico y perfeccionarán su GP23, para llegar a Jerez con el cuchillo entre los dientes. “Seguimos adelante, todo tiene un por qué, no hay nada que no sepamos por qué pasó. Y esto es lo más importante. El equipo y yo vamos de la mano y estamos mostrando un buen nivel“.