El mundial de MotoGP arranca motores este viernes, pero ya ha regalado los primeros barriles del mercado de pilotos. Primero el anuncio de la separación entre Yamaha y Franco Morbidelli, luego la llegada de Alex Rins junto a Fabio Quartararo a partir de 2024. Ahora queda entender el nuevo destino del ítalo-brasileño de la Academia VR46, con el fabricante Iwata ofreciendo una salida en WorldSBK, donde tomaría el relevo de Razgatlioglu.
La línea del atardecer Morbidelli-Yamaha
La gran misión de Franco Morbidelli en MotoGP en 2023 era volver a las zonas altas, pero no pasó de una tímida y aislada cuarta plaza. Sus actuaciones ciertamente han mejorado respecto a la temporada anterior, pero los malos resultados de 2022 han influido mucho en las decisiones del fabricante japonés. La doble prueba privada en la YZR-M1 de Toprak ciertamente no fue accidental, pero no tuvo éxito. Después de ocho rondas, con Yamaha último en la clasificación de constructores, se necesitaba al menos un desvío cosmético. La salida de Morbidelli fue un acto casi necesario para intentar revertir un año muy decepcionante hasta el momento
Su campeón, Fabio Quartararo, no tiene plena confianza en las capacidades de desarrollo actuales de los ingenieros, no tiene un equipo satélite y su M1 es competitivo solo en casos aislados. La relación entre Yamaha y Franky había estado en juego durante algún tiempo, cuando a finales de 2022 Lin Jarvis admitió que Razgatlioglu era quizás la mejor opción tras la salida de Maverick Viñales. Las dos pruebas del campeón turco fueron inútiles, sus actuaciones con un prototipo de MotoGP no estuvieron a la altura de las expectativas. La marca japonesa aprovechó la oportunidad para explotar el descontento de Alex Rins con Honda, culpable según él de no brindarle el trato de piloto oficial como inicialmente prometió.
¿El futuro está en MotoGP?
El fichaje ya llevaba un par de meses en el aire, queda por entender el destino de Franco Morbidelli. De su lado tiene al grupo VR46 de Valentino Rossi, ocupado en encontrarle un sillín en MotoGP. Gresini es una opción tangible, dado que Marco Bezzecchi se reconfirma en el Mooney VR46 Racing Team con un Desmosedici de fábrica. La otra hipótesis lleva a LCR Honda tras el vacío dejado por Rins. Sin embargo, tiene que lidiar con el joven y talentoso Tony Arbolino asistido por el experto mánager Carlo Pernat, quien ya colocó a Enea Bastianini en Ducati, primero con Gresini y luego en el equipo oficial. Superbike sigue siendo una pista viable, pero el ítalo-brasileño quiere demostrar que todavía tiene algo que decir en la categoría reina.