Francesco Bagnaia lidera el campeonato de MotoGP y se encamina hacia el segundo título consecutivo. El alumno de la Academia VR46 se dirige hacia otro hito histórico: después de 15 victorias está a la par de Andrea Dovizioso para convertirse en el piloto más exitoso con Ducati. Encabezando la lista está Casey Stoner con 23 victorias. Ya campeón de Moto2 en la temporada 2018, Pecco tuvo que pasar por momentos difíciles antes de convertirse en una estrella en la categoría reina.
El amanecer de Francesco Bagnaia
Con la victoria en el título de MotoGP en 2022, Pecco Bagnaia alcanzó el punto más alto de su carrera deportiva hasta la fecha. Pero llegar allí no siempre ha sido fácil para el joven de 26 años, que creció a la sombra de la Academia de Valentino Rossi tras su complicado debut en el Mundial, tanto que pensó en cambiar de rumbo. Una carrera que comenzó en 2012 con 15 años, cuando entró en el CEV Moto3, donde ya se cruzó con Alex Márquez y otros. “Siempre he peleado en lo más alto contra Rins y Márquez. Pero luego me di cuenta de que no estaba listo para la Copa del Mundo, así que quería quedarme en la liga española un año más.“.
Las primeras nubes en mi carrera
Los planes del piloto piamontés cambiaron cuando debutó en el GP de Moto3 en 2013 con una FTR Honda junto a Romano Fenati en el Team Italia. Francesco Bagnaia no logró instalarse perfectamente en la nueva categoría de inmediato, obteniendo cero puntos y un gran golpe para la moral. “Fue el mayor error de mi carrera. Yo era piloto de Dorna y me querían en el Campeonato del Mundo. De ahí este paso prematuro“, le dijo a Speedweek.com. En 17 Grandes Premios nunca ha entrado en el top 15, siendo un puesto 16 en Malasia su mejor resultado. “Esa experiencia me ayuda a dominar situaciones difíciles hoy. Aprendí a nunca rendirme“.
la primera victoria
En 2014 empezó a dar un paso adelante, también gracias a su entrada en el Sky Racing Team VR46, de nuevo con Romano Fenati como compañero. Luego pasó al equipo de fábrica Mahindra de Jorge «Aspar» Martínez, donde llegaron sus primeros podios y victorias. El primer éxito en Assen, circuito que lleva tatuado en el cuerpo para toda la vida. La estancia en el equipo Aspar también le permitió aprender el idioma español. “Me dieron la motivación para volver a la cima. les estoy agradecido por eso“.