A la espera de los primeros test oficiales en Sepang, para mantener viva la atención sobre MotoGP, hablamos de todo. Teorías, suposiciones, parloteo, mucho”bla bla bla“. En determinadas circunstancias, como en este caso, sería adecuado hablar de mejoras realizadas en el circo del Campeonato del Mundo. Si el debate colectivo se centra en la (divisiva) introducción de la Sprint Race, este año se implementarán dos novedades nada despreciables. Conceptualmente, bajo el lema del reclamo “Por la salud de los pilotos“. En concreto, de forma algo inesperada, se realizarán pruebas de alcohol en sangre a los pilotos durante los fines de semana de carrera, pero no solo. Mucho más importante y significativo es el endurecimiento deseado por la FIM con respecto a los casos de “concusión” (concusión). Una acción tardía, pero ciertamente necesaria y bien recibida por todos.
LAS PRUEBAS DE ALCOHOL SE HA INTRODUCIDO EN MOTOGP
Dijimos. A partir de este año se realizarán controles de alcoholemia a los pilotos durante los fines de semana de carreras de MotoGP. Pues sí: esto es una novedad, ya que había una clara”vacío” en el reglamento deportivo sobre la materia. Es un poco extraño pensar que en la Asama Highlands Race de 1955, la primera competencia importante de motocicletas en el Sol Naciente, las reglas preveían la descalificación de los pilotos que se encontraran en estado de embriaguez al final de la competencia. Todo esto hace 68 años. Ahora también hemos llegado al mundial de MotoGP..
¿EN QUE CONSISTIRÁN?
El procedimiento será similar a las pruebas antidopaje introducidas desde hace varias temporadas. En cada prueba individual prevista por el calendario, se sortearán 3 pilotos (no necesariamente de MotoGP) o, a criterio, se convocarán determinados perfiles a criterio de los comisarios. Los pilotos serán sometidos a pruebas de aliento y/o análisis de sangre, poniéndose a disposición para ser convocados en el período comprendido entre las 12 horas previas a la sesión inaugural de entrenamientos libres y los 30 minutos siguientes a la finalización de la carrera. Ah, sí, por supuesto: obviamente sorber Prosecco en el podio para los 3 primeros clasificados no representará una violación en este sentido. En ese caso estará sobradamente justificado.
¡LA DESCALIFICACIÓN TAMBIÉN SE ESPERA!
La infracción consistirá en superar una tasa de alcohol en sangre de 0,10 g/l. Muy bajo, considerando que, en nuestro hermoso país, “el nivel de alcohol en sangre se considera normal si es inferior a 0,50 g/l” mi “un nivel de alcohol superior a 0,30 g/l siempre determina alteraciones del comportamiento“. En definitiva, a los pilotos no se les concederá nada, también porque las sanciones serán ejemplares: exclusión inmediata del fin de semana de carrera en curso e incluso la posibilidad de descalificación de varios Grandes Premios.
PROTOCOLO SOBRE CONMOCIONES MOTOGP
Incluso antes del caso Hamlin en el fútbol americano, la FIM (Federación Internacional de Motociclismo) había previsto un protocolo sobre las llamadas conmociones cerebrales (conmociones cerebrales) que implementará en la temporada 2023 de MotoGP. Así es el SCAT5, quinta versión del “Herramienta de evaluación de conmoción cerebral deportiva“, herramienta estandarizada y unificada en varios deportes (adoptada por las principales federaciones) para la evaluación de las conmociones cerebrales. Los médicos de carrera deberán implementarlo ante cualquier sospecha, evitando así que se repitan algunos episodios comentados ocurridos recientemente. Pregúntale a Raúl Fernández, que quedó libre para volver a subirse a su moto en las Pruebas de Buriram tras una terrible caída, pero claramente confundido.
Jonathan Rea la espléndida biografía: “In Testa” disponible en Amazon