Marc Márquez aparece y desaparece del paddock de Jerez, una vez más no estará en pista tras romperse su primer metacarpiano derecho. Esa maniobra en la carrera de Portimao le está costando muy cara, mucho más que la doble Long Lap Penalty prevista por la Dirección de Carrera y sobre la que el Tribunal de Apelación aún no se ha pronunciado de forma definitiva. El jueves presentó el Garaje 93 de Repsol en el centro de la ciudad andaluza, un evento pionero en MotoGP, pero es difícil disimular su descontento.
El desaliento de Marc Márquez
“La verdad es que ahora mismo estoy triste, pero veros a todos me ilumina la cara y me empuja a seguir con la curación.“. Difícil mantener la calma después de perderse tres fines de semana de carrera, la fractura del pulgar es más complicada de lo esperado. Iba a ser el año de la gran remontada, en cambio Marc Márquez se reencuentra en ese largo túnel de lesiones que parece no tener salida. “Han sido años difíciles en los que he sufrido una lesión tras otra, pero estoy convencido de que tarde o temprano saldremos adelante y que cada vez vamos mejorando. Forcé, ya me conocéis, puse fuerte para estar aquí en el Gran Premio de Jerez, hicimos todo lo posible. Pero cuando tres equipos diferentes de médicos te desaconsejan correr, tienes que pensar en ello.“.
arresto de medicos
Lo ocurrido en el arranque de la temporada 2020 de MotoGP en Jerez significó mucho en la vida del campeón. No solo a nivel deportivo, sino también a nivel humano. Su forma de acercarse a este deporte ha cambiado, aunque el instinto caníbal es difícil de apagar y lo vimos en el Algarve. Arriesgarse este fin de semana significó no solo otro descanso de tres meses, sino arriesgarse a poner fin a su carrera.
Desde que Marc Márquez sufrió durante casi dos años tras romperse el brazo en Jerez en julio de 2020, el seis veces campeón del mundo de MotoGP ya no quiere poner en peligro su salud y su carrera. Correr riesgos tiene poco sentido, especialmente ahora que las esperanzas de ganar el título casi se han desvanecido. “No es que de repente no quiera correr más riesgos. Cuando compito en un Gran Premio, lo hago porque estoy dispuesto a correr el riesgo. Di el 100% para poder correr aquí en Jerez. Pero si tres equipos médicos diferentes en España, Estados Unidos y Austria sugieren detenerme, entonces debo seguir el consejo de los médicos.“.
El cuadro clínico del piloto de Honda
Para dar más explicaciones médicas está el Dr. Ignacio Roger de Ona, que operó a Marc Márquez en el Hospital Internacional Ruber el pasado 27 de marzo. La del campeón de Honda tiene un nombre preciso y particular, «fractura de Bennett». Se trata «una fractura donde el fragmento es tan pequeño que no tiene la oportunidad de colocar una placa o tornillos, como sería el caso de una fractura del metacarpiano o la falange“. Esto explica por qué los tiempos de recuperación son tan largos. El personal quirúrgico logró poner “el hueso en su lugar y fijarlo con dos tornillos percutáneos. Pudimos insertar dos tornillos de titanio de 1,2 mm.“.
El último Tac hizo que los médicos le aconsejaran que no volviera a subirse a la bicicleta. “El problema de esta fractura es que cuando Marc se sube a la moto no se puede esperar que esos tornillos resistan la fractura“, continuó el Dr. Ignacio Roger de Ona en Dazn. “Necesitas que esa fractura tenga algún grado de consolidación. En deportistas profesionales, el tiempo que tarda en consolidarse esta fractura para alguien que tiene una mano muy fuerte es de unas seis semanas“.
Incluso los médicos que siguen al piloto en EE. UU. y en Austria han estado de acuerdo con la parada. Es casi seguro que volveremos a ver a Marc Márquez en Le Mans…”La decisión fue unánime: cuatro semanas después de una fractura de Bennett es un riesgo inaceptable. Especialmente si esta grieta, que ahora es perfecta, se mueve, no podremos obtener una reducción como la que teníamos. Y los tiempos serían mucho más largos“.
Foto: MotoGP.com