Alex Rins pagó cara la caída de Mugello, rompiéndose la tibia y el peroné. Tras pasar 16 días en el hospital, inicia un largo periodo de rehabilitación que le obliga también a perderse la próxima carrera en Silverstone. Su proceso de recuperación es lento, pero podrían llegar noticias sensacionales del mercado antes de su regreso. El piloto del equipo LCR Honda ya ha llegado a un acuerdo con Yamaha para apoyar a Fabio Quartararo a partir de la próxima temporada de MotoGP.
El mal recuerdo de Mugello
A la espera de conocer oficialmente los próximos movimientos del mercado, Alex Rins sigue siendo uno de los pocos pilotos que ha logrado socavar el dominio de Ducati con la victoria en Texas. Lástima que una RC213V no estuviera a la altura y la mala lesión comprometiera parte de este Campeonato del Mundo. En un video publicado por el equipo, el español mostró lo difícil que fue su recuperación, comenzando por la dinámica de la caída. “Me fui volando con la desgracia de caer de rodillas y así esta obra de arte“, explica con sarcasmo el abanderado del equipo LCR.
La caída y la recuperación no fueron motivo para interrumpir sus planes de boda con su ahora esposa Alexandra, llegando a la ceremonia en silla de ruedas. “La palabra verano no existe para mi“, asegura que se mantiene firme y no tendrá ninguna repercusión en la moral. ¿Qué hace para recuperar la mejor condición? “Gimnasio, por la mañana, súper inductivo después… El verano se traduce en playa, bicis de trial, buggies“. Lo peor ya ha quedado atrás, aunque es imposible olvidar las horas que siguieron al accidente en la pista toscana. “Me pusieron epidural ya las tres horas despertó mi pierna mala, recién operada y la otra dormida. Tuve mucho dolor todo el día, lloré de dolor“.
El regreso a la pista
Para Rins, la lesión llegó en un gran momento en la pista. Un año complicado para Honda, pero en el que consiguieron hacerse con un excelente primer puesto con una moto que desde luego no fue nada fácil. Inmediatamente logró adaptarse al Honda RC-V y ahora tiene todas las ganas de volver para obtener más satisfacciones. “Estoy trabajando muchas horas para volver cuanto antes y tocar los balones del equipo, porque sé que me echan de menos.“.