El trienio de MotoGP 2020-2022 con HRC no fue un comienzo fácil para Álex Márquez. Tras un primer año con los colores oficiales de Repsol Honda en el que consiguió dos podios, tuvo que aceptar de buena gana el traspaso a la LCR sin poder llegar nunca al top-3. Gracias a Ducati y al equipo Gresini, ha seguido adelante, redescubierto su entusiasmo y ganas de divertirse. El talento que le llevó a ser dos veces campeón del mundo no se ha extinguido, sino que lo asfixió una RC213V en plena crisis técnica.
El difícil debut en MotoGP
Alex Márquez siempre ha reiterado que no ha tenido «la oportunidad de probar cualquier cosacon el fabricante japonés, ensombrecido también por la ausencia de su hermano Marc Márquez, que supuso el inicio de una pesadilla para la marca de velas. Pese a dos podios como debutante en 2020, su compromiso no se vio recompensado y el equipo ascendió a Espargaró incluso antes de poner a prueba al menor de los hermanos de Cervera. Su sueño»era tener éxito con Repsol“, al igual que su hermano en su debut en MotoGP en 2013. En cambio, fue el comienzo de un largo calvario que lo llevó a cambiar de decoración.
En el equipo satélite la situación fue empeorando progresivamente hasta convertirse en algo realmente crítico en 2022. “no tenia armas para poder pelear“, dice Alex en el podcast ‘A Tutto Gas’. “Es algo que me llevó mentalmente al límite el año pasado. Estuve tres semanas sin bicicleta porque era duro para mí, estaba mentalmente destruido“. En LCR encontró un ambiente cálido y familiar, “trabajamos mucho con Lucio (Cecchinello, ed.) pero era como si Honda simplemente no estuviera interesado“.
Una nueva cuñada para Alex Márquez
Tras dos excelentes rondas en Portimao y Termas, donde logró un tercer puesto, la mala suerte le siguió en las siguientes tres rondas con una serie de caídas y accidentes. En estos días, Álex Márquez está especialmente activo con sus parejas, entusiasmado con el amor que ha florecido entre su hermano Marc y Gemma. En las redes sociales, irónicamente, lanzó una petición para evitar que Marc lo eche de la casa que comparte en las afueras de Madrid. “Espero que no hagan las maletas y me echen de la casa.“. Ante la pregunta de uno de sus seguidores, responde: “Ahora duermo en el sitio de siempre y además lo tengo todo para mí sola. Aprovecharé mis últimos momentos entre estas paredes…“.