El movimiento español lleva años produciendo talento sobre dos ruedas. Uno de ellos es Jaume Masia, que llegó a Moto3 a tiempo completo en 2018 como una joven e interesante promesa ibérica. Un ciclista que parecía destinado a convertirse en grande en poco tiempo, sin embargo, aún no ha encontrado ese algo extra para lanzarse realmente a la lucha mundial. Ni siquiera en los dos años bajo el ala del “mago” Aki Ajo. Hemos visto algunas buenas señales, una tendencia demasiado fluctuante no ha ayudado. ¿Qué esperar de Masia en 2023? Definitivamente es un misterio en este momento.
Corriente alterna
El verdadero debut se produjo en 2017, pero solo durante cuatro GP como suplente o comodín. Luego sigue el debut a tiempo completo, pero la aventura mundial comienza con dos años complejos, condicionados también por las lesiones. A pesar de ello, en 2019 la Masia conquistó la primera buena victoria y otros tres podios, el primero de la categoría. Signos alentadores, sin embargo, sin secuela, como también veremos en los próximos años. En concreto, en 2020 suman dos victorias y otro podio, posiciones que valen la 6ª plaza del campeonato. Al año siguiente triunfa en el primer GP, durante el año llegan tres podios más y es 4º, pero parece haber acusado mucho el talento explosivo de Pedro Acosta… En este 2022 el punto de inflexión parecía cercano. Durante cuatro GP, desde América hasta Francia, Masia nunca más se baja del podio, ¡de hecho son cuatro victorias! Pero es solo un momento pasajero, dado que solo llegarán dos podios más en los GP restantes. Es su mejor año en cuanto a puntos, pero no es suficiente para que pase del 6º puesto del mundo.
Jaume Masia da Mondiale?
No olvidemos que tiene 22 años, aunque ahora es uno de los veteranos de Moto3 por derecho propio. La experiencia es, por tanto, definitivamente uno de los puntos a su favor. Pero también hay inconvenientes: uno de ellos es la falta de consistencia, como demostramos en el párrafo anterior. Y el injustificable episodio con Toba en Valencia es quizás también un síntoma de frustración por algo que no sale como estaba previsto. No estamos en la cabeza del piloto, pero su hoja de ruta muestra siempre excelentes resultados alternando con GP más apagados. Masia no parece haber sacado ese coraje, esa “malicia” que probablemente le hubiera permitido estar aún más adelante. Pero la historia no se hace con ‘ifs’ y el algemesi de 22 años, interesante promesa española con cinco años de experiencia, corre el riesgo de ser una ‘estrella fallida’. En 2023 volverá a Leopard Racing, con el que ya corrió en 2020: ¿la ocasión del verdadero punto de inflexión?
Crédito de la foto: motogp.com