Su primer año mundial empezó tarde. Efectivamente, David Muñoz aún no había alcanzado la edad mínima para competir en el Mundial de Moto3. Pero el haberse perdido 7 GP no fue realmente un impedimento serio, dado que pronto se colocó en las zonas altas entre los aspirantes a rookies del año. De hecho, ¡también han llegado los primeros podios del campeonato! Otra promesa española que pronto llamó la atención, también por un estilo de conducción un tanto kamikaze, que suscitó muchas críticas. Pero sigue siendo un niño pequeño que pronto podría convertirse en un gran protagonista.
Debut con broche de oro
Un ‘retrasado’: de hecho, no le vemos en las siete primeras pruebas, el joven español cumple 16 años durante el Gran Premio de Francia. El debut oficial se produce pues en Mugello, pero David Muñoz empieza a hacerse notar con seriedad en la que es apenas su segunda cita mundial. ¡Se engancha con el grupo del podio, finalmente agarra el segundo escalón con las uñas y por lo tanto el primer podio mundial! En Austria Muñoz volverá a ser protagonista en el top 3 de la carrera, arrebatando la tercera plaza a Deniz Oncu en el último minuto. Un segundo podio de fuerza que le había permitido escalar posiciones entre los debutantes y acercarse significativamente a los dos al mando, Diogo Moreira y Daniel Holgado. Al final acabó tercero, a menos de 20 puntos del brasileño, 13º campeón del mundo sin siete GP. Le faltó un poco más de consistencia, cometió varios errores (y no nos referimos solo a los tres ceros), pero en balance podemos hablar de una temporada absolutamente sobresaliente.
¿Muñoz ya puede apuntar alto?
Podemos responder con un sí o un no. Por supuesto, ya ha reportado resultados impresionantes, pero ¿podrá implementar el exploit visto en 2022? Muñoz es joven, ya ha demostrado un talento que aún no ha florecido del todo, pero no olvidemos su estilo de pilotaje bastante exuberante. También llegó una sanción a Assen por un accidente con Masia, varios otros pilotos se quejaron de sus maniobras arriesgadas. Un aspecto que no es precisamente una ventaja, pero arriesgó más y también logró resultados significativos: no brilló en consistencia, pero ya subió dos veces al podio. Algo que ningún otro debutante pudo hacer en 2022 (Holgado paró en uno, Moreira solo lo tocó). Un detalle a refinar, para explotar mejor la vehemencia que ya lo distingue. Al final, además de más experiencia, solo le falta constancia y un poco más de “cabeza” para dar realmente miedo.
Crédito de la foto: motogp.com