Roberto Antonellini, director del equipo 2R Racing Team, mira por la ventana de su taller y ve los campos inundados. El agua llegó a pocos metros de su domicilio y de la sede de su equipo, enfrascado en la CIV Supersport 300. Hasta el domingo, sin embargo, no pudo darse cuenta de la catástrofe que le rodeaba. Vive en Conventello, una fracción del municipio de Rávena. A pocos kilómetros de él se encuentran las zonas más afectadas por el desastre.
“Tuve suerte a mi lado es todo agua y barro –Roberto Antonellini le dice a Corsedimoto – La semana pasada le compré una desmontadora de neumáticos a un chico de Trento.. Sabiendo que soy de Romaña, puso algunos comestibles en mi paquete pensando que yo también había tenido agua en casa. Es un gesto que me llamó mucho la atención. Luego fui a Lugo y presté los generadores que uso en hostelería a los que no tenían electricidad, así que fui a Sant’Agata sul Santerno a recoger la moto de Alex Ricci para arreglarla en el taller. Presencié escenas angustiosas que nunca imaginé ver en Romaña en 2023″.
¿Qué te impactó más?
“Las carreteras de asfalto normales parecían pistas de motocross en días lluviosos. Sólo montañas de tierra, barro y escombros de todo tipo. Viendo la televisión no te das cuenta de lo que pasó en Romaña. ¡Hay tanta gente sin agua, comida, nada! También perdieron sus billeteras con documentos, tarjetas de crédito y dinero en el lodo. Realmente no les queda nada en casa. Mientras avanzaba por la carretera con el camión del equipo, me detuve y entregué todo lo que tenía, los útiles de hostelería que tenía, por tanto agua, botellas de té, galletas, pan para las tostadas… Además, también había traído algunas cosas de casa para tratar de dar mi pequeña ayuda”.
¿Estás de vuelta?
“Sí, volví a llevar generadores a otras familias y me sentí terrible. Yo estaba ahí con mi carro familiar en la calle y a mi alrededor gente que no tenía nada. Estaba allí para hacer algo bueno prestando generadores, pero todavía me sentía como una mierda. Ahora, sin embargo, regresaré para traer alguna ayuda porque no puedo presenciar tales escenas a un tiro de piedra de mi casa sin hacer nada. Espero que todos hagan su parte porque realmente hay una necesidad».