Durante la mayor parte de la temporada fue el líder de MotoGP. Fabio Quartararo ahora llega a Malasia en segundo lugar, a 14 puntos del nuevo líder Pecco Bagnaia. Una nueva perspectiva, interesante para el piloto de Yamaha, que en cierto sentido parece casi «aliviado», como si se hubiera liberado de la presión que le acusaba hasta ahora como líder. Quartararo está muy dispuesto a dar su opinión, solo contra Bagnaia y el resto del ejército de Ducati. Él, en cambio, no puede ni contar con la ayuda de Franco Morbidelli, que está en aprietos perpetuos en este 2022. ‘El Diablo’ admite que es incapaz de explicar esta gran diferencia con su compañero de box.
Quartararo juega la carga
Un cambio de perspectiva y mentalidad para la jornada de Sepang. Para Fabio Quartararo esto parece ser una motivación extra. “Ahora no tengo nada que perder, solo tengo que esforzarme al máximo. Miro al GP de otra manera” comentó el campeón defensor. “Pecco se ha recuperado mucho, pero nosotros también podemos hacerlo. Todavía podemos cambiarlo todo, no ha terminado». El as de Yamaha cree en ello: los últimos GP problemáticos han quedado atrás, ahora está concentrado de nuevo. Quedan dos jornadas por jugar, por lo que un potencial de 50 puntos, y 14 puntos no es un margen seguro para Bagnaia, aunque matemáticamente tenga el primer punto de partido. Imprescindible la parada en el Circuito Internacional de Sepang. «En 2019 tuvimos algunas dificultades en el último sector, pero me gustó la pista». Luego indicar el ‘programa’ del fin de semana. «Tenemos que empezar bien de inmediato, tal vez buscando alguna mejora en la moto, incluso si las sensaciones son buenas». Otro objetivo es una buena posición en la parrilla para ser explotada en la carrera. Con la segunda MotoGP en la mira, ahora más difícil pero no imposible, como él mismo reiteró.
«¿Morbidelli? No entiendo»
Claramente también hay una mirada hacia el futuro. «Nos falta algo en todos los aspectos, no solo en el motor» agregó Quartararo. Sin embargo, destacando que “En Yamaha saben lo que hay que hacer y no tengo que repetirlo cada vez, están trabajando en ello. Misano ya iba a buen ritmo, entonces a ver si podemos mejorar algo también a nivel de chasis». En Ducati hay ocho, Davide Tardozzi se ha expresado sobre la cuestión de los juegos de equipo. Quartararo, en cambio, esperaba una posible ayuda del compañero de box Franco Morbidelli… «Es una situación difícil de entender» admitió el actual campeón de MotoGP. Ha pasado de un M1 de 2019 a la versión de 2021, pero ya lleva un año y medio compitiendo. Es cierto que este año todos estamos luchando, pero si puedo hacer ciertos tiempos significa que él también puede hacerlos. De vez en cuando trato de ayudarlo, pero nunca logra dar el paso en la calificación y en la carrera…»
Foto: motogp.com