Tanta ilusión genera la presentación del nuevo SF-23, el coche con el que Charles Leclerc y Carlos Sainz intentarán asaltar el título mundial de F1. Una misión complicada con un éxito incierto, teniendo en cuenta que Red Bull dominó en 2022 y que Mercedes debería volver con fuerza este año.
En Maranello se esforzaron mucho en crear un monoplaza ganador, intentando eliminar los defectos del F1-75, empezando por la menos que excelente fiabilidad. Este aspecto es fundamental para ganar, además de mejorar en cuanto al desgaste de los neumáticos. Se conocieron las áreas de intervención y el equipo trabajó para poner a los corredores en las condiciones técnicas ideales. También es vital avanzar en las estrategias, evitando repetir los errores del pasado.
¿Leclerc de Ferrari a Mercedes?
Leclerc espera mucho de Ferrari en la nueva temporada, quiere ganar carreras y cumplir su sueño de convertirse en campeón del mundo de Fórmula 1. Su contrato expira en 2024 y su ilusión es conseguir grandes satisfacciones en estos dos años.
Pronto se hablará de renovación o de un posible futuro traspaso a otro equipo, pero recientemente se han filtrado rumores sobre un interés de Mercedes. Toto Wolff estaría pensando en Charles para sustituir a Lewis Hamilton, que expira a finales de 2023 y que debería prorrogar un año más antes de valorar uno posible.
Charles responde a los rumores
Leclerc, interceptado por el periodista Leo Turrini del periódico nacionaltuvo la oportunidad de responder a los rumores filtrados sobre su futuro: “No hay negociación. Me siento bien en Ferrari, siento la ilusión de la gente y me emociona la idea de cumplir el sueño de ganar con la Ferrari“.
El piloto monegasco no piensa en absoluto en un cambio de equipo, está orgulloso de correr para el equipo de Maranello y quiere hacer todo lo posible para devolverlo al título de F1. Es normal que Mercedes pueda hacer un seguimiento de su situación, cada equipo top mira a los mejores pilotos de la parrilla, pero a día de hoy todavía no hay motivos para pensar que Charles dejará la parrilla. caballo encabritado.
Foto: Ferrari