Doriano Vietti se mostró especialmente feliz en el Trofeo Nacional 1000. Había sido autor de un 2023 muy positivo y todo en progresión. Había subido al podio tres veces, había competido con dos campeones del mundo como Christian Gamarino y Niccolò Canepa y con el líder de la categoría Gabriele Giannini. Luego terminó el campeonato en cuarta posición y en su corazón aspiraba al título de 2024. Esperanzas vanas, él tampoco podrá competir debido al reglamento que excluye a los menores de 30 años que marcaron menos de 1’37 en Misano (leer aquí ).
“Estoy muy contento con cómo ha ido la temporada de este año. comenta Doriano Vietti a Corsedimoto – El equipo RR y yo éramos muy fuertes. Por supuesto, teníamos un gran paquete técnico, pero nos enfrentábamos a pilotos con más experiencia que yo y con motos de clase mundial. Me molesta que alguien trabaje duro para intentar ir rápido, haga sacrificios de tiempo y sobre todo económicos y al final de año todo el esfuerzo no se recompense en lo más mínimo: no hay intereses por parte de nadie. Además, uno se ve excluido de un campeonato que podría haber vuelto a hacer, siempre por diversión, manteniéndose en un alto nivel y con costes moderadamente bajos. Me encuentro derrocado sólo porque era fuerte”.
El nuevo reglamento impide a los pilotos elegir
“Entiendo muy bien que la Federación quiera tener más pilotos en la CIV Superbike y está a favor de ello, pero para lograr este objetivo necesitamos animar a la gente a que lo haga, no impedirles que hagan otra cosa. Sabemos que participar en la CIV Superbike es muy caro. No culpo a nadie, pero aquí en Italia, aparte del fútbol, no hay interés en invertir en deporte. Los conductores se quedan a su suerte: si tienen mucho dinero siguen corriendo, si no, se quedan en casa y observan a los demás, que pueden ir incluso más lento pero continúan. A nadie le importa si el campeonato va bien o mal: los pilotos bien pagados todavía consiguen una plaza para el año siguiente y los equipos ganan muy bien sin prestar demasiada atención a los resultados”.
En la CIV Superbike tienes que tener todo en la cima, de lo contrario te quemarás.
“Este año me veo obligado a ir a competir en el CIV Superbike que está ahí, es un campeonato maravilloso, no es que uno no quiera hacerlo, pero debería haber ayuda. El nivel es muy alto y si ahorras dinero harás el ridículo. O vas con una moto de competición, cambiando las gomas necesarias, haciendo pruebas o te apuntas sólo para hacer acto de presencia pero te quemas. Esto me marea. No quiero señalar a nadie, pero en Italia no existe ningún tipo de meritocracia en general y en nuestro deporte menos aún: no existe en absoluto. Entiendo las necesidades de todos, pero podría haber una manera de animar a la gente a correr porque si seguimos así habrá cada vez menos pilotos compitiendo en Italia: la gente se está cansando”.
Foto Salvatore Annarumma
La espléndida biografía de Jonathan Rea: “In Testa” disponible en Amazon