Federico Esposto y Alberto Di Folco, amigos o más bien hermanos, unidos por la pasión por los motores de dos o cuatro ruedas. Alberto Di Folco es uno de los pilotos de coches más respetados de Italia en el sector de los GT. Fue Campeón de Europa de Lamborghini Pro-Am, piloto de GT3, vicecampeón italiano de GT, y subió al podio en las 24 Horas de Spa… En su deporte es una estrella pero hoy es un chico desesperado. Tocando su recuerdo de Federico Esposta publicado en redes sociales.
“¿Qué pasa con mi amigo? Aparte de la tristeza, la rabia y el vacío que estoy sintiendo estos días hay muy poco que añadir. Solo esperé hasta el final que solo fuera un mal sueño y que nunca me encontraría hablando de ti en esta circunstancia. En estos momentos nunca hay palabras correctas y lamentablemente no te traerán de vuelta.
La vida a veces es cruel e injusta, todos lo sabemos, pero esta vez realmente ha exagerado. Un chico como tú debería haber vivido otros 100 años. Un verdadero amigo, una infinita bondad de alma, siempre soleado, tu sonrisa fue verdaderamente contagiosa. No había una persona que no te amara. Hablando estos días con otros todos hemos dicho las mismas cosas y sobre todo que nunca ha habido una vez que te hayamos visto con la cara. ¡Eras especial y cualquiera que te haya conocido, aunque sea por un solo día, inmediatamente se enamoró de ti y ya te amaba como a un hermano!
Pasión en común
Para mí eras más que un hermano y la pasión por la velocidad nos ha atado aún más en este último periodo. Tú también, como yo, estabas obsesionado con este deporte y hubieras hecho todo lo posible para lograr tus objetivos y juntos te hubiera ayudado como podía con solo estar cerca de ti y creer en ti. Tenías talento y determinación, y aunque se dé por sentado, lo único que me ayuda a seguir adelante es pensar que esta tragedia sucedió justo cuando estabas haciendo lo que más te gustaba en el mundo.
el ultimo abrazo
Nunca olvidaré el último abrazo que nos dimos hace apenas 3 semanas en Imola justo debajo del podio. Fuiste el primero en llegar, nunca lo olvidaré. Siempre te llevaré en mi corazón y desde hoy correré por ti, estarás en el carro conmigo amigo.
Ahora se que estarás ocupado haciendo dos bolígrafos con el SIC pero trata de darnos una mano también para darle fuerza a tu hermosa novia María y tu familia. ¡No puedo ni imaginar el dolor que están sintiendo en este momento y te prometo que haré todo, tanto yo como tus amigos para estar cerca de ellos y darles fuerza! Ya te estás extrañando como el aire y de verdad espero volver a verte algún día, a ti y a esa hermosa sonrisa que siempre tienes en la cara».
En Amazon “Cómo diseñé mi sueño” la autobiografía del genio Adrian Newey