La compañía estadounidense lanza al mercado dos nuevos lubricantes que pueden cubrir las necesidades de los motociclistas más meticulosos
Cuando hablamos de tecnología aplicada a las motos pensamos en motos voladoras, radares predictivos y conducción autónoma o una dispositivos de seguridad cada vez más conectados entre el hombre y el vehículo.
Sin embargo, nunca se nos ocurriría asociar progreso tecnológico para el aceite de motor. Pero no, porque la evolución de los lubricantes está dando pasos de gigante para garantizar el rendimiento y por supuesto el cuidado de nuestros amados motores. Por esto en lo nuestro RideStyle hoy hablemos de las noticias de Bardahl, una empresa especializada en lubricantes que ha desarrollado dos productos premium dedicados a quienes usan la bicicleta en la pista o fuera de la carretera, pero también en la carretera. Sí, porque los aceites de motor XTC y XT4S son capaces de combinar protección y máximo rendimiento gracias a una serie de innovaciones patentadas que los hacen más eficaces y seguros. ¿Quieres saber cómo? ¡Solo mira el video!
La formula
Empecemos por lo básico, no los de la química, sino los de los aceites Bardahl que utiliza bases sintéticas desarrolladas en automovilismo para la gama de lubricantes diseñados específicamente para motores de 4 tiempos y para el XT4S, la base está compuesta por polialfaolefinas y ésteres sintéticos: los mejores materiales del mercado, que garantizan un mejor funcionamiento a bajas temperaturas y aún más longevidad.
La fórmula básica de los lubricantes de 4 tiempos de Bardahl, denominada MCOpermite combinar la protección del motor y del engranaje con el máximo rendimiento del embrague, ya sea en seco o en baño de aceite o con caja de cambios integrada o separada
A esto se le suman otros tres elementos:
– Y polímero radial lo que aumenta la acción protectora de la película, o más bien de la capa protectora del lubricante que evita la corrosión de las partes metálicas. Este polímero puede ser más efectivo porque tiene una estructura en estrella que retrasa la descomposición y aumenta el rendimiento de transmisión.
– Una combinación química de moléculas polaresque como tales se adhieren como imanes a las superficies metálicas de los engranajes y del motor, formando así un segundo nivel de protección, además de la película que tiene un valor particular contra el gripado del motor y sobre la longevidad del cigüeñal y la biela, que que para aquellos que usan la bicicleta en el campo de las carreras, en el circuito o en enduro, suena como un buen consuelo.
– El último ingrediente que hace que estos dos productos sean innovadores es Tecnología FulleRene C60, que explota el Fullerene, una nueva forma de carbono compuesta por 60 átomos agrupados en una estructura tridimensional: ¿y cómo puede ser beneficioso el carbono dentro de un lubricante? Sencillo, la estructura de los átomos cumple la función de un rodamiento de bolas que protege los engranajes, realizando una función antifricción.
Triple acción
Tres elementos que realizan una triple acción: imaginemos que tenemos bajo el microscopio el punto de contacto entre 2 engranajes o dos superficies del motor, lo cual es bueno recordar, aunque a simple vista parezcan lisos tienen muchas ondulaciones. Veríamos como además de la película protectora del polímero radial también encontraríamos las moléculas polares imantadas a las paredes, y en el flujo del lubricante las moléculas de fullereno, además protector para piezas de motor y embrague. Esto explica cómo incluso el aceite dentro de una lata puede ser una herramienta de alta tecnología, un dispositivo, como está de moda hoy en día, para proteger y cuidar mejor tu motocicleta.