El dolor, el coraje. Giulia Pozzato ha estado trabajando en motociclismo durante algún tiempo con el equipo 322 Racing Service Misano. El pasado domingo estuvo en el MWC con sus pilotos y con ella estaba su hija, que jugaba con el hijo de Giraudo, fallecido en el accidente. Giulia Pozzato ha publicado una carta en las redes sociales que te hace temblar. Cuenta la historia de Nicolò, un niño de 9 años que veía a su papá como un súper héroe. Giulia Pozzato nos ha autorizado a publicarlo íntegro para concienciar al movimiento motociclista sobre el tema de la seguridad.
La carta de Giulia Pozzato
“Lloré toda la noche pensando en los ojos de Nicolò, que me dice «estoy esperando a que vuelva papá y luego nos vamos a casa», mientras juega con mi hija Lea y nos contamos historias. No puedo soportar solo este peso en mi corazón, esas palabras que resuenan en mi cabeza y van a mi estómago como un cuchillo. Cuanto sufro solo las paredes de la casa lo saben. No soy lo suficientemente fuerte para esto.
Quiero más seguridad.
Escucha a los pilotos que te piden «más seguridad» y te dan consejos para mejorarla, no vayas más lejos. Después de escuchar esas palabras y tener la fuerza para empezar a contar historias sobre castillos de hadas y unicornios sin echarme a llorar, creo que ya tuve suficiente para arriesgarme. No puedo dejar de pensar en ello, no puedo decir «son competiciones». No quiero volver a ver a otro Nicolò esperando a su papá. Estaremos en primera fila para aumentar la seguridad en la pista, es nuestro mundo, el de Fabrizio.
Nuestra pasión, pero si tenemos que correr, queremos hacerlo con seguridad. No puedo permanecer indiferente ante esos ojos, los ojos de un niño que acaba de perder a su padre, ese niño que siempre lo ha seguido a todas partes y que para él su papá es el héroe más grande del mundo.
No te quedes indiferente ante esos ojos. Disculpe el arrebato, pero es un peso demasiado pesado para llevar en el corazón. Creo que hablo en nombre de todo el paddock, así que lo firmaré como: ‘El Paddock’.